Catalunya : un ‘road trip’ por el Val d'Aran
De ruta por el Val d'Aran
Esta ruta fue una escapada en coche de fin de semana largo que quería hacer desde hacía ya bastante tiempo y por fin se dio. He de decir que fue gracias al COVID, de lo contrario me hubiera ido de viaje a algún lado fuera de España después de no haber cogido un avión desde hace tanto tiempo, pero con todas las restricciones que hay en los sitios a los que quiero ir, la verdad es que no me motiva demasiado.
Fuimos al Val d’Aran por 4 días a finales de Mayo, la temperatura era bastante buena para la zona y la época, entre los 20ºC y 11ºC, la mayoría de los días el tiempo ayudó bastante con sol y nubes, pero sin lluvias como estaba previsto. He de agregar que no había mucha gente, y que entre el Covid y las fechas, en la mayoría de los pueblos no había mucha vida. Comentar, para los que no lo saben, que el Val d’Aran es muy conocido como sitio para hacer ski / snowboarding en invierno, especialmente en Baqueira, en donde está todo preparado para que te subas al telesilla, ascender por el medio de los pueblos hasta llegar a la cima y empezar a esquiar.
Empezamos el viaje rumbo al Val d’Aran pero con un desvío y parada estratégico de un sitio al que quería ir también, y que estaba, digamos, que de camino (aunque había que desviarse un poco).
Fuimos hasta Sant Llorenç de Morunys a descubrir el Pantano de La Llosa del Cavall, en Lleida. Es una presa bastante grande y con un paisaje espectacular alrededor para dar un paseo en coche y rodearla, tiene el agua de un color… que no imaginé que vería allí! Es un verde-turquesa bellísimo que parece que estés en un paraíso. De allí fuimos hacia el Santuari de Lord, un pequeño monasterio en la cima de la montaña desde donde se ve todo el pantano. Hay que estacionar el coche y subir caminando unos 15-20 minutos, cuando nosotros fuimos estaba cerrado el acceso al monasterio pero las vistas eran preciosas.
Después de esta parada sorprendente, nos fuimos hacia el Val d’Aran en los Pirineos Catalanes y cerca de la frontera con Francia. Aquí visitamos muchísimos pueblitos con encanto e hicimos algunas rutas obligatorias de la zona.
Día 1
El primer día nos fuimos a hacer una ruta por Montgarri. Se llega a Pla de Beret (dejando atrás Baqueira-Beret) donde hay un gran parking, según vienes de Baqueira y en entras en el parking al final a mano izquierda encuentras un caminito y allí empieza la Ruta circular de Montagrri. Es un paseo super fácil de hacer, con unos paisajes preciosos y se tardan unas 4-5 horas ida y vuelta yendo a paso lento (modo paseo). Tener en cuenta de que una vez se llega al Santuario de Montgarri se puede dar la vuelta por el mismo sendero o se puede regresar por otro camino en medio de la montaña, el cual no aconsejo porque los paisajes y las vistas no son lo mismo, y para mi no vale la pena, a parte de que el camino se vuelve un poco más duro de hacer, hay mucha subida mientras que el otro es todo en plano; y además los coches tienen acceso por lo que pierde parte de la magia y la conexión con la naturaleza.
Después de nuestra ruta del día nos fuimos a conocer pueblitos de alrededor que son muy característicos de la zona, con sus detalles en las puertas y buzones, sus flores coloridas en todos los balcones, su arquitectura del Pirineo Catalán y su estilo montañés. En este día visitamos Vilac:
Y Garós:
Ambos son encantadores, como si estuvieras en un cuento de hadas, a unos 10 minutos de distancia en coche entre uno y otro, y son muy pequeños por lo que es muy viable hacer ambos en una misma tarde, como máximo tardas 30 mins en recorrer cada uno. Desafortunadamente, en nuestro viaje no había nada abierto, pero en una situación normal, sin COVID, comer o tomarse algo en alguno hubiera estado genial.
Día 2
El segundo día nos decantamos por hacer la Ruta del Bosque Encantado de Carlac, que también es circular, y les adelanto que esta ruta me dejó muerta, aunque mi forma física no es que fuera muy buena.
Para llegar hasta aquí fuimos hasta Bausen, una vez allí caminamos hacia la Iglesia de Sant Pere y la dejamos atrás por nuestra derecha siguiendo por un caminito que nos llevó a una capilla y a una especie de mirador, seguimos por un sendero estrecho y es cuando nos adentramos a la aventura. Al empezar el camino no es muy plano pero vas bien, y de repente empiezan las subidas en montaña que si no estas en muy buena forma se te hace un infierno, y a medida que caminas… no mejora! Se deben seguir las marcas rojas en alguno de los arboles que te indican que vas por el buen camino, y cuando ya llegas a la cima del todo, entonces empiezas a descender por un sendero más fácil y llevadero, y unas bonitas vistas.
Para hacer este recorrido de dificultad media se tardan unas 3-4 horas ida y vuelta en hacer la ruta, y la verdad que es muy curioso, porque aquí parece que estuvieras en un mundo de fantasía, las raíces de los arboles adoptan unas formas extrañas y parece que los arboles que cobren vida.
Luego nos fuimos a conocer los pueblos de la lista que tocaban ese día, y éstos fueron Bagergue:
Y continuamos hacia Unha:
Día 3
El último día hicimos la Ruta de Uelhs Deth Joeu. Para llegar allí es muy fácil, hay que ir a Es Bordes y una vez allí, desviarse hacia Antiga de Lin. Hay 3 parkings en los que dejar el coche, y desde ellos se accede a la ruta que es circular como las dos anteriores. Nosotros aparcamos en el segundo parque o el llamado Parking Uelhs Deth Joeu, y desde allí a unos poco metros introduciéndonos en el camino ya encontramos la primera y la más importante cascada de la ruta, y así comenzamos el paseo. Al principio tiene bastante subida entre los arboles, aunque ayudan las escaleras que hay, y una vez llegas arriba puedes ir a la derecha o izquierda, nosotros fuimos hacia la izquierda dirección Antiga de Lin, y después de poco caminar encontramos una inmensa pradera con unas imponentes montañas alrededor. Un sitio espectacular para sentarse a disfrutar del paisaje, descansar, y pasear por los alrededores. Una vez continuas el camino, en seguida ya se llega a una carretera con acceso a coches que te lleva de vuelta al parking.
Es una ruta muy fácil, la más fácil de todas, y se tarda 1-1,5h como mucho en hacerla.
Después de este paseo, nos fuimos a visitar los pueblos que nos quedaban por conocer de nuestra lista, los cuales fueron Vielha:
Y Arties:
Dónde quedarse?
Nosotros nos quedamos en Vielha, que es el pueblo con más movimiento y más sitos para comprar y comer del valle, aunque he de decir que no consideramos que fuera una decisión acertada para el plan que llevábamos de relax, leer, naturaleza, paseos y pueblitos con encanto. Lo que nos hubiera gustado haber hecho una vez vivida la experiencia, sería haber alquilado una casita con chimenea para poder pasar tiempo allí.
Nuestro alojamiento era muy bonito, limpísimo y con mucho gusto. El dueño era un encanto y muy amable. Pero el sitio se nos quedó muy pequeño para estar en casa y podernos relajar a gusto.
Si vas con coche, en realidad, no importa mucho dónde te quedes porque todo está muy cerca. Nosotros hubiéramos elegido una casita en medio de la nada o en un pueblito pequeño con naturaleza alrededor para desconectar de la ciudad y el estrés de la misma.
Dónde comer?
Aquí no voy a dar mucho detalle porque la verdad que la mayoría de los sitios estaban cerrados, y no fue un viaje de comer mucho, más bien todo lo contrario, pero sí que les voy a recomendar este sitio que nos gustó bastante, la atención fue muy buena, y además, el dueño es quien cria a los animales y cultiva los alimentos que se ofrecen en el restaurante, por lo que todo es orgánico, local y fresco. El sitio se llama Nosati y está situado en la calle principal de Vielha.